La anécdota cuenta que en los años de la primera presidencia de Perón la oposición no tenia demasiados espacios para expresarse y en algunos casos duramente perseguida.
El cantante de la Marcha peronista y también actor de cine, Hugo del Carril, se decidió a hacer su opera prima basado en un libro llamado Río oscuro De Alfredo Varela un militante comunista que en ese momento se encontraba preso, justamente por eso, por ser comunista y propagandizar el marxismo.
Hugo del Carril quedo tan impresionado por el relato del libro y de cómo detallaba la dura vida de los yerbateros, que con eso e influenciado por las primeras películas del neorrealismo italiano que llegaban a la Argentina, se decidió por llevar el libro de Varela a la pantalla grande.
Pero como escribí al inicio, Varela estaba preso e incomunicado. Recodemos que en aquella época existía la censura y todo lo que se hacia debía pasar por una oficina que calificaba la película, allí se encontraba un tal señor Apold, conocido de Evita y amigo del General, era amo y señor de lo que aparecía por Cine, radio, diarios y posteriormente TV por aquellos años peronistas.
Sabiendo esto, Hugo del Carril solicito hablar con Evita, a quien conocía de la época que trabajaron junto en cine, en la película la Cabalgata del circo, y le solicito poder interceder para que pueda verlo a Varela en la cárcel y que este autorizara realizar la película.
Eva hablo con Perón y este dio el permiso.
Así se pudo concretar la realización de una de las películas mas logradas del cine argentino, por lo que cuenta, por la maestría de narrar de Hugo del Carril y porque ya comenzaba a gestarse un estilo propio de la cinematografía argentina, que solo unos pocos lograron adoptar hasta la actualidad.
Hoy es impensable, que ocurran hechos de censura o perdida de libertad por pensar distinto o tener otra ideología de una tan absurda ( no quita que ocurran, como ocurren, hechos de injusticia, pero hay herramientas democráticas para enfrentarlas). Pero también es impensable que ocurran gestos como los Hugo del Carril, peronista consumado, de llevar al cine la obra de un comunista y el otro gesto de Eva de interceder y de Perón de acceder a un pedido, en donde lo que se va a contar son hechos de tal injusticia social que es imposible negarse.
Hoy la pareja gobernante tiene otra Kara y otra forma de brindar gestos, Pino Solanas conoció las dos Karas de esos gestos. Ojala que el tren en la próxima estación no siga de largo y pare, hay mucha gente que esta esperando subir.
